Menos burocracia, facilidad para la gestión y dotación económica, las claves de la Ley de la Serra

La Ley de la Serra de Tramuntana tendrá como puntos claves "menos burocracia, más facilidad para la gestión administrativa y, sin duda, dotación económica", según ha apuntado el nuevo director insular de la Dirección de la Serra de Tramuntana, Antoni Solivellas, alcalde de Escorca desde 2011.

Así se ha referido Solivellas tras jurar el cargo este viernes, en un acto que ha contado con la presencia del presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, y el conseller de Presidencia, Antoni Fuster, al que le han acompañado los ediles de varios municipios de la Serra.

La nueva Dirección estará adscrita a la de Presidencia de la institución insular, convirtiéndose, según ha dicho Galmés, en el "único interlocutor válido entre la administración y toda la Tramuntana" y centrándose en trabajar en el borrador de esta Ley, que debe tener un consenso "entre los ayuntamientos, los propietarios, los gestores y los pageses", ha señalado Solivellas.

Galmés también ha subrayado el objetivo de ensalzar la Serra como "distintivo de Patrimonio de la Humanidad" para que sea reconocida "como bien patrimonial, medioambiental, cultural, protegerlo y darlo a la ciudadanía de la isla y a nivel internacional". Asimismo, ha indicado que busca hacer que sea un lugar "habitable", ya que las gráficas de núcleos de población revelan que la gente que vive ahí "disminuye día tras día".

PLATAFORMA MA-10

Preguntado Solivellas sobre el vídeo que publicaba este jueves la Plataforma de indignados MA-10 sobre las carreras ilegales en la Serra ha desmentido las afirmaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) de que la velocidad media de las motos en las carreteras de montaña es de 35 kilómetros por hora.

Asimismo, ha asegurado que cree que "la gran mayoría de la gente que va por la sierra lo hace de una forma correcta", pero que "hay que luchar contra una minoría que, realmente, es la que crea el peligro".

En este sentido, ha aclarado que no puede afirmar que vaya a haber medidas concretas, porque las competencias, en cuestiones de tráfico, no son del Consell. Por tanto, ha considerado que "lo que hay que hacer es un esfuerzo desde todas las administraciones para encontrar soluciones a un problema que lleva muchos años existiendo".