El PP rechaza pactar con Vox en el Ayuntamiento de Palma y gobernará en minoría

El PP ha decidido gobernar en minoría el Ayuntamiento de Palma y rechazar la oferta de Vox para conformar una coalición de gobierno estable, una actitud que el líder del partido de extrema derecha en la capital, Fulgencio Coll, ha tildado de "cerrazón".

Coll ha convocado este viernes una rueda de prensa para criticar la postura del próximo alcalde de Palma, el "popular" Jaime Martínez, quien, si no hay un cambio radical en la situación, será elegido en la sesión constitutiva del consistorio de este sábado con los 11 votos de su grupo.

"No he tenido ninguna oferta", ha señalado Coll para describir el resultado de las tres reuniones en las que el PP mantuvo su postura inicial de gobernar en solitario con su mayoría relativa, mientras que Vox defendió la integración en el gobierno de la capital balear de sus 6 ediles.

Para el líder de Vox, general retirado que fue jefe del Estado Mayor del Ejército de 2008 a 2012, el del PP será un "un gobierno débil" frente a una oposición de 18 concejales integrada por los 6 de Vox, 8 del PSOE, 3 de Més y 1 de Podemos.

Coll ha lamentado que el PP no haya "tenido inconveniente" en pactar con su partido para formar gobiernos alternativos al del PSOE, como en el caso de Calvià, donde los socialistas ganaron las elecciones, y sin embargo rechace conformar un ejecutivo municipal estable en la capital balear.

"Un gobierno de coalición tendría suficiente fuerza para revertir las políticas de izquierda que han perjudicado tan gravemente a Palma", ha incidido en concejal electo, que ha prometido hacer una oposición "responsable pero contundente".

Coll, que ha comparecido acompañado de los otros cinco concejales electos de su grupo, que le votarán a él para alcalde, ha remarcado que la decisión de Martínez genera una situación de debilidad perjudicial para la ciudad.

A su juicio, "los ciudadanos votaron por un cambio", pero no por una mayoría absoluta, por lo que "hacer una lectura de los resultados del 28 de mayo sin contar con los votos de Vox" es "irreal e injusto".

Ha pedido "respeto" a sus 32.200 votantes y ha resaltado que su partido entra en el Ayuntamiento de Palma "para hacer política" no para "buscar sillones".

Coll ha apuntado que, aunque no se puede descartar por completo, no contempla que el PP cambie de postura después de las elecciones generales ni que, si lo hace, Vox pueda aceptar entonces sumarse a un gobierno municipal organizado y dotado de altos cargos designados solo por el PP. "Esto no va a cambiar", ha incidido.

"La posición va a ser la de nuestro programa electoral. Tendrá que negociar punto por punto y tendremos que estudiar punto por punto", ha afirmado.