ERC no logra frenar su hemorragia de votos

Perdiendo casi la mitad de sus escaños y 417.000 votos respecto a las elecciones generales de 2019, ERC no ha logrado frenar este domingo su hemorragia electoral, cayendo de trece a siete diputados, lo que le obliga a compartir con Junts la llave independentista para una eventual investidura de Pedro Sánchez.

La candidatura encabezada por el tándem formado por Gabriel Rufián y Teresa Jordà ha sumado 457.263 votos este 23 de julio, lejos de los 874.859 votos que dieron la victoria a Esquerra hace cuatro años en Cataluña y la erigieron en un partido clave para permitir un gobierno de PSOE y Podemos.

Ese resultado se traduce en siete diputados (seis menos que en 2019) y tres senadores (ocho menos que actualmente); si bien ERC se mantiene como la primera fuerza independentista, empata a siete escaños en el Congreso con su principal rival, Junts.

Rufián, en comparecencia en la sede electoral del partido junto a otros dirigentes como Oriol Junqueras y el president Pere Aragonès, ha felicitado a la socialista Meritxell Batet por su victoria en Cataluña, pero no ha mencionado el resultado ni de Alberto Núñez Feijóo ni de Pedro Sánchez.

Pero en las "elecciones españolas más españolas de la historia -ha dicho Rufián-", donde "el bipartidismo se ha reforzado", la "buena noticia de la noche", en palabras del candidato, es que ERC "haya vuelto a ganar dentro del bloque independentista", aunque ha confesado que los resultados no eran los deseados. "Nos debemos sentir muy orgullosos, porque el contexto era terriblemente difícil", ha apuntado.

Yendo más allá de esta noche, el candidato ha avisado de que "el independentismo puede decantar la balanza" del Congreso y, por ello, ha enviado un mensaje a Junts: "Desde el minuto uno nos ponemos a disposición para poner un precio, que debe ser alto y consensuado, para poner sobre la mesa del progresismo español un dilema: o Cataluña o Vox".

"Interpelamos directamente al resto del independentismo para que nos pongamos de acuerdo, porque lo podemos hacer", ha insistido, y ha añadido: "Sería un fracaso que no nos pusiéramos de acuerdo y la gente tuviera que votar eternamente".