Estos son los efectos de comer sandía todos los días del verano

Llegan las altas temperaturas y con ellas la recomendación de mantenerse hidratados y optar por comidas frescas y ligeras.

Entre todas ellas, la sandía se destaca como la reina del verano, compitiendo con el melón, debido a su sabor dulce y a que está compuesta en un 96% de agua.

Sin embargo, la sandía no solo hidrata, sino que también ofrece muchos otros beneficios para la salud, lo que la convierte en una fruta casi perfecta.

Según indica la Clínica Mayo de Estados Unidos, la sandía es la fruta o vegetal más rica en licopeno, un potente antioxidante que se relaciona con un menor riesgo cardiovascular y ayuda a prevenir patologías oculares relacionadas con la edad.

Además, la sandía contribuye a mantener una buena salud ocular gracias a su contenido en vitamina A, que también es beneficiosa para la piel.

También es rica en vitamina B6, la cual ayuda al cuerpo a procesar mejor las proteínas y beneficia los sistemas inmunológico y nervioso.

Por otro lado, la vitamina C presente en esta fruta fortalece el sistema inmunológico y facilita la absorción de hierro.

La sandía no solo es rica en vitaminas, sino que también contiene un importante porcentaje de potasio, que según la Clínica Mayo, ayuda a regular la presión arterial.

Está comprobado que la sandía tiene múltiples beneficios. Sin embargo, ahora que ha llegado el verano, ¿es recomendable comerla todos los días? Según el portal especializado en nutrición Everyday Health, es "técnicamente seguro" consumir esta fruta a diario, pero es importante tener en cuenta algunas consideraciones.

El sitio web recuerda que es más saludable disfrutar de una variedad más amplia de frutas y verduras en lugar de centrarse solo en una. Además, se explica que el consumo de sandía no debe superar el 30% de la ingesta total de alimentos en un día.