Cómo eliminar las molestas mosquitas de la cocina: trucos caseros para que desaparezcan

Las molestas mosquitas suelen aparecer debido a la humedad del ambiente, la presencia de ciertos alimentos en descomposición, como frutas pasadas, o restos de comida en el fregadero.

Además de resultar irritantes, es importante tener cuidado, ya que pueden convertirse rápidamente en una plaga. Por lo tanto, es mejor combatirlas cuanto antes.

Lo primero que debes hacer es identificar la causa de su aparición. Si se debe a frutas o alimentos en mal estado, desecha esos alimentos y limpia la zona donde se encontraban para evitar dejar restos que puedan atraer a las mosquitas.

Existen varios productos disponibles en tiendas para acabar con estos insectos, pero también hay alternativas sencillas que puedes preparar en casa para ahuyentarlos o eliminarlos.

PLANTAS

Una forma de evitar su aparición o repelerlas es colocar plantas en la cocina.

La albahaca y la menta son dos plantas aromáticas que no les agradan debido a su fuerte olor. Otras plantas útiles son la lavanda, la caléndula y la citronela.

Puedes triturar una hoja de laurel y dejarla en un frasco abierto, o colgar una rama de laurel en la cocina.

VELAS AROMÁTICAS

Encender velas aromáticas, como las de citronela, también puede ayudar, ya que su olor actúa como repelente.

TRUCO CASERO

Mezclar en un recipiente un vaso de agua, tres cucharadas de vinagre, una de detergente y una de azúcar. Dejar el recipiente en la encimera, las mosquitas acudirán y se ahogarán en el líquido.

Si bien estos remedios caseros pueden ser útiles, lo más recomendable es la prevención. Para evitar su aparición, te sugerimos seguir estas recomendaciones:

En primer lugar, asegúrate de desechar la basura con regularidad, especialmente los residuos orgánicos.

Además, es importante guardar las frutas y verduras maduras en el refrigerador. Evita dejar platos con restos de comida en el fregadero y asegúrate de mantener los desagües libres de restos de comida. Asimismo, es fundamental limpiar y reemplazar periódicamente los estropajos y las bayetas.