Cómo saber si se ha colado una serpiente en casa

Más allá del pánico que puede generarnos ver una serpiente, es fundamental conocer las señales de alarma que nos indican la presencia de estos reptiles en casa, así como las precauciones que debemos tomar para mantener nuestra seguridad y la de nuestras familias en el caso de vivir o visitar lugares donde estos animales son habituales.

Sí en tu hogar has detectado más de un ratón debes saber que estos roedores son el "alimento" favorito del que buscan alimentarse las víboras, por lo que debes eliminar esa presencia de inmediato para evitar atraerlas.

DÓNDE SE ESCONDEN

- Dentro o alrededor de montones de ropa

- Cerca de las cañerías de agua

- En tanques sépticos o sistemas de plomería

- Cajas de almacenamiento

-En áreas restringidas y con poca luz

- En las repisas de las paredes

- Espacios entre muebles y paredes

SEÑALES DE ALARMA

- Piel de serpiente: las serpientes mudan su piel periódicamente, y la piel desechada puede ser un indicador claro de su presencia. Si encuentras piel de serpiente en tu patio o en algún rincón de tu casa, es una señal de que una serpiente ha estado cerca y podría seguir merodeando.

- Marcas de serpiente: las serpientes dejan rastros en la tierra o el polvo a medida que se arrastran. Estas marcas pueden ser una serie de líneas en forma de “S” o una forma ondulada que se asemeje al movimiento de una serpiente.

- Excremento de serpiente: el excremento de serpiente, también conocido como deyecciones, es otro signo de la presencia de estos reptiles. Si encuentras heces de serpiente en tu propiedad, puede ser una señal de que una víbora ha estado alimentándose y es un indicio de su presencia cercana.

- Avistamientos visuales: la forma más evidente de confirmar la presencia de una serpiente es avistarla directamente. Algunas víboras tienen patrones de colores que les permiten camuflarse en su entorno, por lo que es esencial estar atento a movimientos lentos o formas que no correspondan al entorno.

PRECAUCIONES Y RECOMENDACIONES

- Mantén la calma: Si sospechas o confirmas la presencia de una serpiente, lo más importante es mantener la calma. No intentes atraparla, matarla o acercarte a ella, ya que las serpientes pueden responder agresivamente si se sienten amenazadas.

- Mantén a los niños y las mascotas seguros: si hay niños o mascotas en tu hogar, asegúrate de que estén alejados de la zona donde se ha detectado la presencia de una serpiente. Educa a los niños sobre la importancia de no tocar ni acercarse a estos reptiles y supervisa a tus mascotas cuando estén al aire libre.

- Llama a profesionales: ante la presencia de una víbora en tu propiedad, es recomendable llamar a un experto en manejo de vida silvestre o a una empresa de control de plagas.

Estos profesionales tienen el conocimiento y los equipos necesarios para lidiar de manera segura con la situación, evitando cualquier riesgo innecesario.

- Realiza limpiezas regulares: para reducir las posibilidades de que una serpiente se sienta atraída por tu patio o casa, es importante mantener una buena higiene. Retira pilas de madera, escombros y otros objetos que puedan servir como refugio para las serpientes. Mantén el césped corto y los arbustos bien podados.

- Aprende sobre las especies locales: familiarízate con las especies que son comunes en tu área. Esto te ayudará a identificar mejor las señales de alarma y a saber cómo actuar en caso de un encuentro con una serpiente.

SERPIENTES EN BALEARES

En las Islas Baleares encontramos cinco especies diferentes de serpientes, dos de las cuales se consideran ya autóctonas debido a la antigüedad de su introducción: estas son la serp de garriga, una especie protegida que en el caso de ser capturada hay que liberarla y la serp d'aigua.

Las otras tres especies presentes en Baleares son la serp de ferradura (de herradura), la serp verda y la serp blanca. En este caso, desde la Conselleria se recomienda capturar los ejemplares de este tipo de serpientes para poder reducir su población.

Aunque estos animales son especies protegidas en la península Ibérica, en Baleares pierden esta protección al ser especies introducidas. Ninguna de las especies mencionadas es peligrosa para los seres humanos.