La planta que es capaz de llevar a algunas personas al suicidio

Existe una amplia variedad de plantas venenosas en el mundo que pueden causar problemas de salud si no se manejan con precaución.

Una de estas plantas es la "Dendrocnide moroides", perteneciente a la familia de las ortigas "Urticaceae", que se encuentra en las selvas tropicales de Malasia y Australia.

Conocida también como "Gympie-Gympie" o "planta suicida", esta planta posee un aguijón extremadamente doloroso que, según se informa, ha provocado pensamientos suicidas en quienes han tenido el desafortunado encuentro con ella.

Se ha documentado que el dolor causado por esta planta puede persistir por más de un año si no se retiran los pelos urticantes de la piel, y que la intensidad del dolor se incrementa cada 20 a 30 minutos.

Las personas que entran en contacto con esta planta pueden experimentar hinchazón en las extremidades, graves reacciones alérgicas, estornudos incontrolables y erupciones cutáneas. Un reporte del "Daily Mail" mencionó el caso de un hombre que utilizó la planta como papel higiénico y sufrió un dolor tan insoportable que terminó suicidándose.

El "Gympie-gympie", también llamado "árbol urticante australiano", es considerado una de las plantas más venenosas del mundo. Su picadura es tan severa que ha sido descrita como una sensación comparable a "quemarse con ácido caliente y recibir una descarga eléctrica simultáneamente".

El simple contacto con esta planta, incluso por un instante, puede desencadenar un ardor intenso debido a sus diminutas agujas similares a cabellos. La "Dendrocnide moroides" fue descubierta en Australia cuando, en 1866, el caballo de un topógrafo la tocó y, tras sufrir un dolor extremo, "enloqueció y murió en dos horas".