Una policía fuera de servicio salva la vida de un perro que su dueño había dejado atado en un árbol de un bosque

La Policía investiga a un hombre por un presunto delito de maltrato animal al dejar atado a su perro en un árbol durante un día en una zona boscosa de Ibiza.

Una agente de Policía Nacional fuera de servicio, paseando en compañía de su perro, detectó a finales de mayo la presencia de un perro raza pitbull atado a un árbol. 

Después de valorar la situación y viendo que no aparecía nadie que se ocupara del perro decidió acercarse a él.

Comprobó que el animal respondía de forma cariñosa y lo soltó llevándolo en compañía de su perro hasta una zona en la que se puso en contacto con quien podía resolver la situación porque en el lugar donde se encontraba el can no había buena cobertura telefónica.

De hecho, el primer contacto fue con Policía Local quien les remitió a un Centro de Recuperación Animal. 

Empleados de este centro se hicieron cargo y gracias al chip que portaba el perro pudieron saber quién era su propietario y se pusieron en contacto con él.

El propietario comentó a los responsables del centro que había perdido el perro un día antes pero que no había comunicado este hecho.

No fue hasta tres días más tarde que el propietario fue a recuperar su perro.

Por estas circunstancias, ante la posible negligencia del propietario, la Policía Nacional abrió diligencias que remitió al juzgado de instrucción de guardia.

Ante la Policía, el propietario manifestó que lo había dejado al cuidado de unos amigos dos días antes y que no pudo ir a buscarlo.